LA CARGADA EMPRESARIAL

Política

Por: Eliseo Moreno Chin

Y ahora, de cuando acá han sido tan patriotas y defensores del IFE y de la democracia los señores del dinero.

Ahora con mucho furor y hasta con rabia fustigan a los legisladores y defienden a los Consejeros del IFE; hasta en los Estados ya se alzaron con tal furia que parece una nueva cruzada cristera a favor de la no sacralización del IFE.

¿Qué o quién los alienta?, pues estos señores sólo ven y han visto, históricamente hablando, para sus muy particulares intereses, cien por ciento económicos.

Veamos. En primer lugar, la utilización de la posible remoción de los Consejeros es una argucia o un pretexto para denostar y retraer la propuesta de reforma electoral; a ellos no les afecta en nada la remoción de los actuales Consejeros; lo que sí les afectaría es la aprobación de las nuevas reglas en la contienda electoral y la aplicación que de estas nuevas reglas tendrían que hacer los futuros Consejeros, so pena de ser enjuiciados de nueva cuenta por la sociedad.

Lo verdaderamente peligroso para estos jeques del dinero, dueños de la economía del país, son las grandes sumas que se dejarían de destinar a las campañas y a las procesos electorales, así como el peligro de que ya no exista la discrecionalidad de los funcionarios y Consejeros del IFE para aplicar y destinar estos recursos a los partidos y a los grandes consorcios del país, ya sea televisoras, fabricantes de material y documentación electoral, empresas de monitoreos, publicistas, etc., todos los cuales viven de los cuantiosos recursos que se destinan, con pocos controles y mucha discrecionalidad, a las campañas, en las cuales los partidos tienen mucha manga ancha.

¿A qué le temen?; pues a una vigilancia directa del Congreso al IFE, por ello no quieren la Contraloría que está propuesta dentro de la reforma constitucional; esto no conviene a sus intereses, y lo que utilizan tanto ellos como los beligerantes Consejeros, es el prurito de la autonomía y de la independencia del órgano electoral, cuando estos principios están referidos más bien a que no haya interferencias o intervenciones en los procesos por parte de terceros, que no tengan nada que ver con la democracia electoral, y que mediante intromisiones incline la balanza de los resultados electorales de uno u otro lado, como pasó en el proceso del 2006. Por ello, la reforma contempla otras reglas encaminada a prevenir y sancionar estas intromisiones.

Y en esto definitivamente está asegurada la autonomía del IFE y la independencia de la labor que realicen sus Consejeros y funcionarios, apegándose desde luego a sus principios rectores y a la ley electoral.

Entonces, ¿por qué aúllan tanto los empresarios?

Pues por consigna, ya les dieron luz verde, porque antes no se habían pronunciado en contra, porque no les interesaba mucho o porque no habían analizada cabalmente el impacto de la reforma en sus ingresos; ahora, tal parece que los están apapachando por las cabezas de sus cúpulas y atrás de éstos, las cabezas no muy visibles de agentes de la plutocracia archi conservadora, con influencia indudable en las redes del poder gobernante, pues ya se están echando para atrás: antes todos los panistas decían sí a la remoción, ahorita, ya tienen sus divisiones.

Y volviendo a los empresarios, ¿por qué de sus aspavientos? Porque le temen a un gobierno de izquierda que los ponga en su lugar y los actuales consejeros ya han dado muestras de no permitirlo; porque no quieren un IFE verdaderamente democrático y abierto a la sociedad, porque no quieren perder sus negocios en materia electoral, porque no quieren que se les toce ni con el pétalo de una rosa y puedan hacer y deshacer como lo hicieron en el pasado proceso electoral, con el visto bueno de la administración foxista, etc., etc.

Por ello es la alharaca, por ello es el escándalo y la desesperación que los obliga a gastar en grandes desplegados e intervenciones mediáticas, y a hasta a comprar a mentes lúcidas pero temperamentos fáciles de intelectuales que los secundan, porque saben que de ello depende gran parte de su futuro económico y de su ingerencia y capacidad para influir en las grandes decisiones nacionales…. a su favor, en este sentido me gustaría escuchar otras voces como la Carlos Monsivaís o Elena Poniatowska.

Ojalá que los legisladores verdaderamente patriotas no se dejen intimidar ni llevar por las mieles o el canto de las sirenas…. de los empresarios.

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